Ruz investigará la implicación de Moncloa en el Faisán desvelada por LA GACETA

El juez incorpora al Sumario el tráfico de llamadas mantenidas el día del soplo entre el jefe de Seguridad del PSOE y Presidencia del Gobierno. Hará llegar las nuevas pruebas al Fiscal y las partes personadas.

R. Gavilán y D. Martínez.Madrid. 

El juez instructor del caso Faisán, Pablo Ruz, decidió ayer unir al Sumario del chivatazo las informaciones desveladas recientemente por LA GACETA, que apuntan directamente a la posible implicación de Presidencia del Gobierno y del PSOE en el escándalo de la delación a la banda asesina ETA. 

En la providencia dictada por Ruz, se admite la denuncia presentada por el sindicato Manos Limpias hace unos días ante la Audiencia Nacional, en la que pedía que se imputara en el caso al ex jefe de Seguridad del PSOE, Fernando Mariscal. La denuncia basaba su acusación en la información revelada por LA GACETA los días 4 y 5 de septiembre, que demostraba el intenso tráfico de llamadas que Mariscal mantuvo con Moncloa y con cargos del PSOE la mañana del chivatazo tras haber hablado previamente con el comisario jefe de la Brigada de Información de San Sebastián, Manuel Risco, cuando este se encontraba en las inmediaciones del bar Faisán. Ahora Ruz ha incluido esas informaciones y los documentos oficiales que prueban su veracidad en el sumario 2/08 que instruye el Faisán, lo que abre la puerta a investigar la posible implicación de Presidencia del Gobierno y del PSOE en el caso. 

Garzón no actuó
Se da la circunstancia de que el sindicato ya había presentado ante la Audiencia, en septiembre de 2006, una denuncia en la que señalaba a Mariscal como “muñidor” del chivatazo a ETA. Esa denuncia –que también se dirigía contra el ex comisario general de Información, Telesforo Rubio– fue finalmente archivada por el juez Baltasar Garzón, entonces instructor del caso, y la línea que apuntaba a Moncloa y a Ferraz nunca se investigó. 

Con las nuevas informaciones reveladas por este diario esas sospechas resurgieron con todo su fulgor y llevaron a Manos Limpias a volver a denunciar los hechos, esta vez acompañándolos de la documentación oficial que LA GACETA reprodujo en sus páginas. A Pablo Ruz sí le han parecido susceptibles de ser investigados –al contrario de lo que hizo Garzón, que incluso instó a Mariscal y Rubio a querellarse contra el sindicato por denuncia falsa– y ha incorporado al Sumario del caso esas pruebas. Además, el juez ya ha dado orden de hacérselas llegar al “Ministerio Fiscal y demás partes personadas” para que tengan conocimiento de ello. 

“El caso ahora adquiere otra dimensión, ahora ya sí puede apuntarse más alto e identificar a los auténticos artífices del chivatazo”, aseguró ayer a LA GACETA el secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernad, tras conocer la noticia de que Ruz estimaba su denuncia. Para Bernad, “se ha abierto la puerta a investigar la posible implicación de nada menos que Presidencia del Gobierno, y el caso apunta ya directamente al Ejecutivo, ya es algo mucho más serio”. Además, el secretario general de Manos Limpias criticó la actitud con que Garzón trató su anterior denuncia y cree que actuó condicionado por “la amistad personal que le une con Mariscal”. Y es que el ex jefe de Seguridad del PSOE trabajó a las órdenes del juez cuando este ocupó el puesto de delegado del Gobierno en el Plan Nacional sobre Drogas, durante la última legislatura de Felipe González como presidente del Gobierno. 

Además, Garzón desestimó en su momento otro indicio que señalaba directamente a Moncloa. Cuando la Guardia Civil le remitió un informe en el que aconsejaba investigar la posible implicación de Presidencia del Gobierno, la decisión del juez, tal y como informó recientemente LA GACETA, fue apartar de las pesquisas a la Benemérita y dejar toda la investigación en manos del entonces inspector policial Carlos Germán.

Fuente: www.intereconomia.com