Manos Limpias acusa a la Seguridad Social de prevaricación, tráfico de influencias y fraude.
El sindicato Manos Limpias ha solicitado a la Fiscalía Anticorrupción que investigue los delitos económicos de la Gerencia Informática de la Seguridad Social (GISS), en relación a la puesta en marcha y el mantenimiento de una herramienta informática que ha costado más de tres millones de euros y que todavía, cuatro años después, no está funcionando. Acusa a este organismo de un presunto delito de prevaricación, tráfico de influencias, estafa y fraude a la Hacienda pública.
El sindicato denuncia, tal y como informó LA GACETA, que la Seguridad Social adjudicó esta oferta a la empresa Nesspro, cuyo representante es el ex funcionario Carlos Sanclemente. La herramienta no cumplía las condiciones del pliego y su instalación “hubiera provocado graves riesgos en el sistema informático de la Seguridad Social”, tal y como detalló en un informe recientemente publicado por este diario la jefa de proyectos de la GISS, Elena Fernández.
La empresa Nesspro ganó en 2007 el concurso, por el que se adjudicó más de un millón de euros. Entre 2007 y 2008 cobraron más de tres millones de euros, aparte del mantenimiento de la herramienta, que ni siquiera se había instalado. Se desconocen los motivos por los que la Intervención General, que fiscaliza todos los contratos y los distintos pagos previamente a su ejecución, no ha investigado estas irregularidades.
Entre los miembros implicados en este caso, el sindicato acusa al secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, por encubrir el delito; a Santos Mañés, responsable de la tramitación de expedientes de compras de la Gerencia Informática, y a Eladio Quintanilla, gerente de la Gerencia Informática, como autores de presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias, fraude y alteración de precios en subastas y concursos. También denuncia a Carlos Sanclemente, beneficiario de dicho contrato de más de tres millones de euros por una herramienta fraudulenta.
Vulnera la ley de contratos del estado
La denuncia del sindicato por las irregularidades en la Seguridad Social se extiende a proyectos estratégicos desfasados más de cuatro años o el derroche de más de 10 millones de euros en un sistema de correo electrónico, a pesar de que existen informes técnicos que corroboran que “su implantación era innecesaria”.
Manos Limpias también acusa a la Seguridad Social de “la compra de 700 portátiles sin localizar” y solicita que se investigue “el proyecto Prosa, el más importante iniciado por la Gerencia de Informática, que se inició en 2003 y que hoy en día no ha llegado ni al 10% del objetivo final”. Atribuye también el delito de “enajenación de inmuebles a precio de saldo, hasta un 29% de su valor en el mercado”.
Por otra parte, el sindicato añade que este organismo “está vulnerando sistemáticamente la ley de contratos del Estado”.
Fuente: www.intereconomia.com
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